Scarlett Johansson confesó a una revista que las fotografías donde se muestra desnuda tenían un destinatario especial, su ahora ex esposo Ryan Reynolds.
La actriz dijo no sentir pena por haberse fotografiado su cuerpo sin ropa pues eran para su entonces amado, de quien se separó el año pasado tras dos años de matrimonio.
En la entrevista para Vanity Fair, Johansson confesó que “conozco mis mejores ángulos. Fueron enviadas a mi esposo. No hay nada de malo en eso. No es como si estuviera filmando una porno… aunque tampoco hay nada de malo en eso”.
Aunque en un principio se dudo de la autenticidad de las instantáneas, más tarde se supo que las fotografías fueron sustraídas ilegalmente del celular de la rubia, así como otras imágenes íntimas que salieron a la luz de otros famosos.