Diputados del PAN y el PRD protagonizan fuerte polémica por el cambio del logo de la Universidad Autónoma de Campeche (UAC), que estuvo plagada de alusiones personales, adjetivos, burlas, gritos, e incluso de palabras altisonantes, que provocaron la participación del público asistente, muchos de ellos, divididos por su militancia y simpatía partidista.
La décimo séptima sesión ordinaria estuvo plagada de faltas a la Ley Orgánica del Poder Legislativo, así como a llamados al orden de la presidencia de la Mesa Directiva, tanto para los mismos legisladores albiazules y el del partido del sol azteca, como para el público presente, e incluso advertencias de que se aplicarían sanciones a los representantes populares que no atendían el llamado.
La “defensa” de los estudiantes universitarios a cargo de los albiazules por el cambio del logo de la Máxima Casa de Estudios, pues afirman les implicará gastos excesivos, aunque no presentaron documento alguno en el que se les pide la denuncia pública ante la máxima tribuna de nuestro Estado, recibió puntual respuesta del representante legislativo del Partido de la Revolución Democrática, quien les pidió no politizar ese asunto ni querer tener injerencia en los temas que son competencia de la Universidad y respetar su autonomía.
Aquí comenzaron los dimes y diretes entre albiazules y el representante del partido del sol azteca, quien aseguró fueron enviados por el presidente municipal de Campeche, Eliseo Fernández Montufar, al que acusó de ejercer un gobierno represor por el despido de trabajadores, en respuesta al comentario de los panistas de una autoridad educativa represiva.
-Gobierno represor, el de enfrente que ha despedido a un sinnúmero de trabajadores creyendo que es su empresa privada –aseguró- y recibió a cambio los gritos de diputados y simpatizantes del PAN, a quienes señaló despedir trabajadores significa un gasto al erario público al perder los laudos.
Esto llevó a que Jorge Nordhausen Carrizalez, de Acción Nacional le recriminara ser diputado de izquierda pero hacer el trabajo “sucio” al acusar al Edil campechano, que en su opinión hace un trabajo excelente y que el enojo era porque ganó el proceso electoral de julio pasado para asegurar que ahora están arrodillados.
Reclamos y más reclamos, acusaciones mutuas, hasta que el perredista Luis García hernandez manifestó que el debate debe ser respetuoso y lo único que hacen los panistas es el ridículo, para dirigirse de manera directa a su interlocutor, y señalar que “si su padre viviera, se moriría de vergüenza”, al defender al Edil “más que a su pareja sentimental”.
Los ánimos se caldearon, los gritos de diputados y público asistente no se dejaron esperar, en tanto la mesa directiva pedía orden y respeto para continuar la sesión, lo que prácticamente fue imposible, que obligó a dos recesos de un minuto.
Era el punto de asuntos generales. El ambiente imperante hizo que coordinadores parlamentarios se pusieran de pie e intercambiaran frases mientras sus expresiones no dejaban lugar a dudas que el enfrentamiento podría ser mayor, al escucharse en el recinto oficial que de uno los protagonistas principales surgían insultos y palabras altisonantes, y reclamaba a la mesa directiva lo ocurrido.
En el recinto, el secretario general y los coordinadores parlamentarios de diferentes bancadas, hablaban con la presidencia de la mesa directiva, lo que seguían atentamente periodistas y público asistente, mientras éste último le gritaba al indignado panista “quiere llorar, quiere llorar”.
Haciendo caso omiso de los gritos de los ciudadanos presentes que señalaban los diputados estaban para trabajar no para protagonizar peleas, y que continuará la sesión, se concluyeron los trabajos de este día y se citó para el próximo martes 27 de noviembre.