Luego de la muerte de un menor, presuntamente, por negligencia médica, el secretario de Salud, Alfonso Cobos Toledo, se lavó las manos y mencionó que el deceso no fue responsabilidad del cuerpo médico que ahí labora.
En entrevista, comentó que la muerte del pequeño en el Hospital de Especialidades “Javier Buenfil Osorio”, se debió a un caso de óbito fetal, cuando el producto muere dentro del útero de la madre.
-Es una patología que existe por diversas causas a diversas semanas, si en este caso alguna familia tienen alguna duda, las puertas del hospital están abiertas para hacer las aclaraciones pertinentes y si no hay aclaración con eso, obviamente está la Comisión de Arbitraje”, dijo.
Aseveró que como en todos los casos, se llevan a cabo investigaciones en torno a este caso y se han llevado a cabo reuniones con la jefatura del servicio clínico.
“La paciente fue ingresada a tiempo al hospital y fue atendida a pesar de la información que manejara un medio electrónico. La paciente fue ingresada a tiempo, los medios electrónicos manejaron diversas cosas, por ejemplo se hablaba que el ultrasonido no se había hecho en el hospital, no es cierto, el ultrasonido fue hecho en el hospital por nuestro médico radiólogo de turno, que precisamente ese día entró de vacaciones, ahí se hizo el ultrasonido”.
En cuanto al menor muerto en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), aseveró que ha recibido órdenes del gobernador Fernando Ortega Bernés para investigar lo sucedido.
“Hicimos contacto con ello, lo que sé, es que es un niño que acudió a consultar a la clínica de Concordia, de ahí fue mandado al hospital general de zona número 1, era un niño con antecedentes al parecer de cuadros constantes de atopia”.