El secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, rechazó tajantemente que en el conjunto de cambios, que fueron avalados en el Congreso, hubiera tenido injerencia alguna la ex secretaria de Estado y actual precandidata presidencial demócrata en Estados Unidos, Hillary Clinton,
Aseguró que la reforma impulsada por el presidente Enrique Peña Nieto para abrir el sector energético al capital privado “es un producto totalmente mexicano”.
“Es absolutamente falso que Hillary Clinton o cualquier entidad del gobierno estadunidense haya sido consultada para la reforma energética mexicana”, declaró Pedro Joaquín Coldwell a La Jornada.
Joaquín Coldwell dijo que la reforma energética propuesta por el presidente Peña Nieto en su primer año de gobierno fue resultado del trabajo de un grupo de funcionarios públicos de las secretarías de Energía, Economía, Hacienda y de Medio Ambiente, así como de las comisiones Nacional de Hidrocarburos y Reguladora de Energía, aseguró. También participaron directivos de Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad, dijo.
Las minutas de las reuniones que sostuvieron los funcionarios que, según Joaquín Coldwell, diseñaron la reforma energética no se han hecho públicas, dijo el funcionario, y mencionó desconocer si en un futuro podrán ser consultadas por el público.
El secretario de Energía aseguró que los únicos modelos energéticos que fueron tomados como referencia por los autores de la reforma energética fueron los de Noruega, Colombia y Brasil. Los dos primeros, dijo, fueron analizados en México en foros públicos, con la participación de miembros del Congreso; y el tercero a partir de viajes, incluido uno que realizó él mismo a Brasil.