La alcaldesa de Baltimore dice que impondrá un toque de queda durante toda la semana después que inconformes saquearon tiendas, incendiaron vehículos y lanzaron ladrillos y otros objetos contra policías.
La alcaldesa Stephanie Rawlings-Blake dijo que el toque de queda se impondrá a partir del martes de 10 de la noche a 5 de la mañana.
Dijo que demasiadas personas han dedicado generaciones a construir la ciudad para que sea destruida.
El gobernador de Maryland Larry Hogan declaró el lunes estado de excepción y activó a la Guardia Nacional para que ayude a controlar los disturbios en Baltimore.
Funcionarios de emergencia trataron incesantemente de restaurar la calma. Bomberos que intentaban apagar un incendio en una tienda CVS fueron entorpecidos por alguien que perforó una manguera conectada a una toma de agua contra incendios.
La familia de Gray quedó sorprendida por la violencia. Esperaban organizar una marcha pacífica durante la semana, informó el abogado de la familia, Billy Murphy. Dijo desconocer que iba a haber disturbios y solicitó que prevaleciera la calma.
No quieren que este movimiento nacional se vea ensuciado por la violencia”, comentó. “Eso no tiene sentido”.
La policía pidió a los padres que localicen a sus hijos y los lleven a casa. Muchos de los que se encontraban en las calles parecían de ascendencia negra, portando mochilas y pantalones color caqui, que son parte del uniforme de muchas escuelas públicas.