Pese a que Campeche FC Nueva Generación se impuso 2 goles por 1 a Petroleros en la tercera jornada de la Liga Nacional Juvenil, Sub-15, para terminar con seis puntos la ronda clasificatoria, no avanzaron a la siguiente ronda al concluir en la séptima posición general, en acciones disputadas en las instalaciones de la Federación Mexicana de Fútbol, en Toluca, Estado de México.
Fue una buena actuación de Campeche FC Nueva Generación en su primera participación en una etapa nacional de este circuito, al concluir en el séptimo lugar general de 25 equipos, cerca de las semifinales a pesar de que no contó con uno de sus elementos como Jovanny Montenegro.
Nueva Generación remó contra la corriente en casi todo el partido, ya que los Petroleros, se adelantaron en el marcador al romper el cero sobre el minuto 11 de juego en los botines de Sergio Huerta, para el 1 a 0.
Nueva Generación empezó a ejecutar su juego y encerró en su campo a los Petroleros, quienes buscaban la victoria para mantener las aspiraciones de avanzar a las semifinales luego de que en la primera jornada empataron y ganaron en penales ante los Potros, pero el marcador no se movió en los siguieron 24 minutos de juego.
Insistió tanto Campeche FC al modificar la estrategia el técnico sobre el minuto 25 de juego al cambiar de posición a David Ortiz por izquierda y Guillermo Patrón por la derecha, para que sobre el minuto 64 de tiempo corrido vino la jugada que le dio el empate a la cantera rojiblanca cuando David Ortiz se fue por la banda superando a la saga por velocidad y dentro del área saco disparo de pierna derecha para marcar un golazo para el, 1 por 1.
Cuando restaban dos minutos del tiempo reglamentario controló el balón en el medio campo Julián Wong y lo retraso a Braulio Herrera, quien sacó servicio al espacio y le sacó provecho a su velocidad Guillermo Patrón quien fue derribado dentro del área en un claro penal no esperó a que el central lo marcara sino que se levantó para quitarse dentro del área grande al arquero, quien lo fauleó para que decretara la pena máxima, que cobró con maestría Benjamín Zubieta con un disparo raso pegado al ángulo inferior izquierdo del arquero para darle la vuelta al marcador.