El serpentinero veracruzano Orlando Lara, uno de los refuerzos que los Piratas de Campeche obtuvieron en el receso del primer torneo de la Liga Mexicana de Béisbol, fue la novedad en el campo de entrenamiento de los filibusteros, luego que estos dividieron honores en tierras tabasqueñas el pasado fin de semana.
La tropa dirigida por el veracruzano Daniel Fernández inició la tercera y última semana de preparación rumbo al segundo torneo de la Temporada “Alfredo Harp Helú” 2018 de la LMB. El campeonato de verano iniciará el martes 3 de julio cuando los Piratas de Campeche reciban en serie de tres cotejos a los Olmecas de Tabasco.
La práctica que llevó el cabalístico 13 de la pretemporada se realizó por la mañana de ayer, en el estadio “Nelson Barrera Romellón”.
Orlando Lara, lanzador zurdo de 33 años de edad, quien llega a la organización bucanera en un cambio con los Acereros de Monclova, donde los campechanos también se hicieron de los servicios del pitcher yucateco Manuel Flores en un cambio por Rolando Valdez.
“Me siento contento de llegar a los Piratas, es un equipo donde tengo varios conocidos y eso me da más confianza”, mencionó el lanzador zurdo, quien está considerado para ser uno de los abridores.
Lara es nativo de Tierra Blanca, Veracruz, y lleva 12 campañas jugando en la LMB. Debutó en el 2007 con los Diablos Rojos del México, donde formó parte de ese equipo en los dos primeros años de su trayectoria como pelotero en el circuito.
Además de tener varios conocidos en la nave filibustera, también conoce a Daniel Fernández, manager de los peninsulares, pues Fernández lo tenía como uno de los abridores de la marabunta roja cuando éstos fueron campeones hace diez años.
Orlando Lara, señaló que se encuentra a un 80 por ciento de sus condiciones físicas.
Los filibusteros entrenaron de nueva cuenta por la mañana, esto con el fin de evitar que la práctica se suspenda ya que por las tardes hay posibilidades de lluvias.
Durante el entrenamiento, se observó que el campechano Francisco Williams, se puso los arreos y estuvo practicando como receptor.
El lanzador Mario González sale este miércoles rumbo a Monterrey, Nuevo León, con el fin de recibir tratamiento físico y evitar una intervención quirúrgica. Su rehabilitación le llevará dos meses y por lo tanto se perderá el próximo torneo.