Los Padres se pasaron la temporada muerta preguntándose qué podía pasar si Christian Villanueva tenía una oportunidad en las Grandes Ligas. Pero es poco probable que la gerencia del equipo haya visualizado esto.
El mexicano Villanueva conectó tres jonrones el martes por la noche para ayudar a los Padres a ganar su primer partido de la temporada, una victoria por 8-4 sobre los Rockies. El tercera base de 26 años de edad ha sido elogiado desde hace tiempo por su potencial como bateador de poder, pero pocos veían venir esta clase de actuación histórica.
Villanueva se unió a Bobby Estalella y Jarret Parker como los únicos jugadores en la historia de las Mayores con un juego de tres cuadrangulares dentro de sus primeros 14 encuentros. Subido en septiembre del año pasado, Villanueva se ha ido para la calle siete veces en sus primeras 40 visitas al plato. Sólo Trevor Story ha sacado la bola más en sus primeros 14 choques a nivel de Grandes Ligas.
“Tengo muchos sueños, muchas metas. Creo que poco a poco estoy empezando a alcanzarlos”, dijo Villanueva.
Un veterano de ocho años en liga menor, el camino de Villanueva era bloqueado en los Cachorros por Kris Bryant. Los Padres creyeron en su poder al bate y le dieron un contrato de ligas menores en diciembre del 2016. Hasta ahora, es una decisión que está rindiendo dividendos.
El primer bambinazo de Villanueva llegó al tercer piso del jardín izquierdo. El segundo y el tercero fueron misiles al último piso del bosque izquierdo. Las velocidades de los cuadrangulares fueron de 105, 106 y 107 millas por hora-sus cuarto, segundo y primer batazos más duros de su joven carrera en las Mayores.
El tercer jonrón de Villanueva provocó que el mexicano saliera de la cueva para reconocer a los fanáticos, algo que no ocurría en el Petco Park desde el 2015.
“Otro sueño realizado, especialmente en una noche como ésta cuando ganamos el primer juego”, dijo Villanueva. “Estaba contento de poner de mi parte”.
Villanueva se convirtió en el noveno jugador de los Padres en dar tres vuelacercas en un encuentro y apenas el segundo en el Petco Park, uniéndose a Hunter Renfroe, quien lo logró el pasado 20 de septiembre.
“Ese muchacho tiene poder”, dijo acerca de Villanueva el manager de los Rockies, Bud Black.
En su única visita al plato que no resultó en jonrón, Villanueva recibió un bolazo del relevista Scott Oberg. Los Padres capitalizaron, anotando tres carreras en esa entrada para tomar la ventaja definitiva.
Villanueva, quien estaba en competencia con Chase Headley y Cory Spangerberg por tiempo de juego en la tercera base, tendrá la oportunidad de construir a base de lo hecho el martes, según el manager Andy Green.
“Es alguien que se está ganando todo lo que está consiguiendo ahora mismo”, dijo Green, en su tercer año como capataz de los Padres. “Luchó para llegar a las Grandes Ligas, luego de estar detrás de un tercera base (Bryant) en Chicago. Pero uno ve el poder, es auténtico”, remarcó.