El Barcelona, con un gol del brasileño Neymar (18) y dos del uruguayo Luis Suárez (67 y 79), dio un paso de gigante para clasificarse para semifinales de la Champions al vencer en la ida de los cuartos al París Saint Germain por 3-1.
El tanto del PSG, que pagó las numerosas ausencias que tenía en su once inicial, lo marcó el holandés Gregory van der Wiel (82).
El partido en el Parque de los Príncipes comenzó con los dos equipos estudiándose.
Poco a poco el Barcelona se hacía dueño del juego y en un balón recuperado por los catalanes, el balón llegó a Messi, que pasó en profundidad a Neymar y el brasileño batió a Sirigu en la salida (18).
Las malas noticias se acumularon para el PSG, ya que no solo encajó el gol, sino que se lesionó su capitán, el brasileño Tiago Silva, que fue sustituido por su compatriota David Luiz, recuperado milagrosamente en 10 días de una lesión muscular que le debía tener alejado de los terrenos de juego durante un mes.
Sin ser un dominio abrumador, el PSG tenía más el balón en el segundo tiempo e intentaba crear peligro sobre el área rival. Pastore (49) y Adrien Rabiot (50) lo intentaron de lejos, pero respondió bien Ter Stegen.
A diferencia del PSG, el Barcelona demostró que su ataque está formado por estrellas y en una extraordinaria jugada por la derecha, Suárez se marchó de tres defensores y batió a Sirigu, logrando el segundo tanto de su equipo (68).
Con el PSG entregado, el Pistolero remató el partido. En una rápida pared con Mascherano, Suárez se plantó en la línea del área grande y clavó un derechazo a la escuadra izquierda del arco de Sirugu (79).
Cuando parecía todo sentenciado, el holandés Gregory van der Wiel disparó de lejos y el balón fue desviado por el francés Jeremy Mathieu, que despistó a su portero (82) y colocó el 3-1 en el marcador.
Con el 3-1 y teniendo en cuenta que el PSG recuperará a los sancionados Zlatan Ibrahimovic y Marco Verratti y quizá a los lesionados Tiago Motta, Tiago Silva y David Luiz, los franceses pueden soñar con la remontada el próximo martes en el Camp Nou, aunque para ello deberán marcar al menos dos goles y que el Barcelona no haga gol, algo que parece imposible con el tridente formado por Neymar, Messi y Suárez.