La dupla mexicana de clavados, Rommel Pacheco y Jahir Ocampo se quedó sin medalla en la prueba de trampolín de tres metros, al ubicarse en el quinto lugar, con 405.39 puntos, este miércoles en los Juegos Olímpicos Río 2016.
Los representantes de Gran Bretaña, Jack Laugher y Chris Mears, se adjudicaron la presea de oro con una puntuación de 454.32; los estadunidenses Sam Dorman y Mike Hixon se colgaron la de plata con 450. 21. Los chinos Yuan Cao y Kai Qin se llevaron el bronce con 443.70.
Los mexicanos vivieron una gran polémica en las competencias de clavados. Después de tirarse su sexto clavado, Ocampo se quejó de que se prendió una luz que lo distrajo, por lo que pidió su repetición.
De inicio los jueces lo permitieron y ambos clavadistas subieron a la plataforma, pero antes de tirarse hubo un cambio de opinión y tuvieron que bajarse. De nueva cuenta se fue a solicitar el permiso de los árbitros, que denegaron firmemente.
La pareja mexicana se encontraba en el quinto puesto en ese momento, pero al final se quedó fuera de las preseas.
Inmediatamente finalizó la competencia, el director de la Conade, Alfredo Castillo, le echó “sal a la herida” al publicar en su cuenta de Twitter su sentir sobre la actuación de la dupla de clavadistas aztecas.
A través de su cuenta @ACC_Castillo, expuso: “Las represalias por no regalar 15 millones de dólares ahí están”, en franca alusión a los problemas que hubo entre la Federación Internacional de Natación (FINA) y México por la cancelación del campeonato mundial que debía celebrarse en territorio azteca en el 2017 y la multa que impuso la organización internacional.