El asistente de dirección, Dave Halls, fue la persona que hizo la entrega de la pistola que mató accidentalmente a Halyna Hutchins, confesó no haber revisado el arma antes de practicar la escena, porque estaba convencido de que las balas que portaba eran balas de mentira.
Halls, fue despedido debido por hacer la entrega del arma; aunque en 2019 fue despedido de otro suceso similar, aunque en esas filmaciones nadie salió herido.
El miércoles se llevó a cabo la confesión, en la oficina del Sheriff de Santa Fe, después de que las autoridades confiscaron 500 cartuchos con munición en el área del rodaje, las cuales se encontraron balas reales mezcladas con falsas. Por su parte, la armera de la producción, Hannah Reed, sostiene haberse encargado de que las municiones que contenía el arma eran falsas; indicó que no tenía conocimiento de la presencia de municiones reales en el set.
La investigación continúa y se piensa en la imputación de alguno de los implicados en la filmación de “Rust”.