Las inundaciones registradas el año pasado por el paso de las tormentas tropicales dejaron zonas con un alto riesgo de incendio, aseguró Alberto Escamilla Nava.
Resaltó que anualmente se pierden alrededor de 22 mil hectáreas en la entidad que junto con Chiapas, Yucatán, Quintana Roo y Jalisco, son de las entidades con mayores daños en el país.
Reconoció que los principales factores siguen siendo la ganadería extensiva, la agricultura mecanizada, donde el tema de los menonitas asociado a la soya, ha tenido efectos negativos y ahora los ejidos incorporan mucha superficie a la mecanización de tierras, asociados con menonitas –indicó.
-El crítico es la ganadería extensiva pues la gente sigue tumbando monte para pretender establecer potreros y, en el Sur, tenemos el asunto de las invasiones pues se deforesta para sembrar pasto para ganadería, y en el caso del sector social, se usa como un sistema de acaparamiento, lo mismo hacen ganaderos que tienen recursos.