Grupo Mall también estafa a Panamá
Por: La Redacción
La empresa desarrolladora de Los Faros de Panamá, Grupo Mall, anunció que está licitando la estructura de la edificación de la torre central de un complejo inmobiliario en Panamá.
Desde que concluyó la cimentación hace alrededor de un año, las obras no han experimentado mayor avance. La construcción de la torre comenzaría “previsiblemente en abril”, dijo la empresa en un comunicado. En los planes originales estaba prevista la entrega del proyecto para 2010.
La empresa anunció también cambios que han afectado al edificio central. Se le han sumado 15 metros de altura, con lo que alcanzará 361 metros —83 plantas—; se han proyectado 20 plantas para oficinas y más estacionamientos. Además, la torre tendrá un hotel de 400 habitaciones gestionado por la cadena dubaití Jumeirah.
Al menos uno de los tres faros tenía que estar ya construido. Por ahora la zona está únicamente cimentada. La compañía asegura que hubo un cambio en los planes urbanísticos que explican la demora. Los rascacielos proyectados son de una altura superior a las cuatro torres que se levantan sobre los antiguos terrenos de la Ciudad Deportiva del Real Madrid.
En el año 2006 se inició el desarrollo del proyecto “Los Faros de Panamá”, tres torres de hasta 361 metros de altura, valoradas en $600 millones.
Cuatro años más tarde, la desarrolladora Grupo Mall adeuda $100 millones, de los cuales $31 millones son a clientes que adquirieron apartamentos. Luego de varias denuncias, se designó un administrador judicial, que solicitó la quiebra de la empresa, en base a que ésta no cuenta con ningún activo que no haya sido objeto de medida cautelar’ y a su incapacidad para hacer frente a las deudas ‘más elementales.
Conocedores de la industria indican que éste tipo de casos ocurren por el modelo de pagar el abono a los desarrolladores del proyecto, práctica que funcionó “mientras el sector fue operado únicamente por panameños”, pero que fue “enviciada” con la llegada de promotores internacionales que incrementaron el boom y con los “corredores piratas”.