Inglaterra por fin pudo conocer a su nuevo príncipe. Los Duques de Cambridge han abandonado ya con su hijo el Hospital de St. Mary’s de Paddington, en cuyas escalinatas de acceso han posado sonrientes junto al recién nacido.
Al salir del centro médico, el príncipe salió con una gran sonrisa y las únicas palabras que dio a la prensa fueron: “Esperen y lo verán (al bebé), lo verán muy pronto”.
Tanto Catalina Middleton como su esposo, el príncipe Guillermo, mostraron, con gran orgullo, a su hijo, quien es tercero en la línea de sucesión para ser rey de Inglaterra. Ambos salieron con ropa color celeste, haciendo alusión al sexo del bebé.
El príncipe Guillermo mencionó “Pesa mucho, es un niño muy grande”, por lo que no dejó de mostrarlo, orgulloso a la prensa.
El nuevo príncipe nació con un peso de 3,790 kilos. El parto fue natural, aunque no ha trascendido si fue inducido, al haber pasado ya una semana desde que salió de cuentas.