Las agencias turísticas de México esperan la llegada de 52 millones de visitantes el año entrante tan sólo en las regiones de Campeche, Chiapas, Quintana Roo, Tabasco y Yucatán, cuando el país entero atrae a unos 22 millones de extranjeros en un año.Están vendiendo la fecha, el solsticio de invierno del año entrante, como un tiempo de renovación. Muchos arqueólogos dicen que la referencia a 2012 en una piedra de 1.300 años marca el fin de un ciclo en el calendario maya.
“No se acaba el mundo, sino termina la era”, comentó Yeanet Zaldo, vocero de la secretaría de turismo del estado de Quintana Roo, donde está la ciudad caribeña de Cancún. “Para nosotros, es un mensaje de esperanza”.
Las ciudades y pueblos en la región maya empezaron este miércoles una cuenta regresiva de un año. En Chiapas, la ciudad de Tapachula, al lado de la frontera con Guatemala, arrancará un reloj digital de más de dos metros en la plaza principal que empezará la cuenta exactamente un año antes de la fecha misteriosa.
En la vecina región arqueológica de Izapa, sacerdotes mayas encenderán incienso, cantarán y ofrecerán plegarias. En la selva tropical de Quintana Roo, entre los centros vacacionales de Cancún y Playa del Carmen, la gente está poniendo mensajes y fotografías en cápsulas del tiempo que serán enterradas por 50 años. Los sacerdotes mayas y danzantes indígenas formarán parte de la ceremonia con un ritual. Y el estado de Yucatán ha anunciado planes para completar el Museo Maya de Méridapara el próximo verano boreal.
“Van a traer personas que aún viven en zonas mayas. Se van a hacer rituales mayas, queman incienso, para remontarnos a aquellos tiempos, para que podamos nosotros conocer esa sabiduría”, dijo Zaldo.