Con tres Cy Young, un premio al Jugador Más Valioso y cinco convocaciones al Juego de Estrellas en su haber, Clayton Kershaw es uno de los mejores lanzadores de su generación y tal vez el mejor.
Pero el zurdo tiene una mancha notable en su carrera: su historial en postemporada. Kershaw lleva 1-5 con efectividad de 5.12 en 11 juegos (ocho aperturas) de por vida en los pléiofs. Y en sus últimas cuatro aperturas desde el 2013-todas contra los Cardenales-el pitcher de 27 años ha permitido 19 carreras (18 limpias) en 22.2 entradas.
El viernes, Kershaw tendrá la oportunidad de mejorar esos números y a la vez ayudar a Los Ángeles a picar adelante en su Serie Divisional de la Liga Nacional al abrir el Juego 1 por los Dodgers contra los Mets en el Dodger Stadium. Jacob DeGrom se subirá a la lomita por los visitantes.
“Nunca es divertido perder; entonces, a tratar de ganar”, dijo Kershaw al preguntársele si los fracasos en postemporadas recientes sirven de motivación para su salida del viernes vs. Nueva York. “No sé si importa mucho la experiencia”.
En sentido general, Kershaw tuvo otra campaña para el recuerdo en los Dodgers. Tuvo marca de 16-7 con efectividad de 2.13 en 33 aperturas. Se convirtió en el primer lanzador de Grandes Ligas con por lo menos 300 ponches (301, para ser exacto) desde que lo hicieron Curt Schilling y Randy Johnson en el 2002, y el primero vistiendo el uniforme de Los Angeles desde Sandy Koufax en 1966.
El zurdo también fue líder de las Mayores en innings lanzados con 232.2 y de la Liga Nacional en ponches por cada 9.0 entradas con 11.64.
Contra los Mets en el 2015, Kershaw tuvo 1-0 con promedio de carreras limpias de 0.56 en dos aperturas. Sin embargo, ambas salidas fueron antes de que el equipo de Queens adquiriera al cubano Yoenis Céspedes, quien ayudó a Nueva York pasar de ser el equipo con la segunda menor cantidad de carreras de la Nacional en la primera mitad de la temporada a ser el de más en la segunda.
“Sí, es un lineup completamente diferente, no sólo por Céspedes”, reconoció Kershaw. “Definitivamente, es un equipo diferente. Obviamente, mucho mejor que el que enfrentamos en julio”.