El Liverpool no se dejó sorprender ante el Leipzig y volvió a ganar 2-0 (global de 4-0) en el partido de “vuelta” de octavos de final de la UEFA Champions League, disputado en el Puskás Arena de Budapest.
La primera parte fue muy vistosa a pesar del 0-0. Tras sus últimos resultados en Premier, el campeón de 2019 salió a reivindicarse, mientras que el segundo de la Bundesliga, obligado por la desventaja en la eliminatoria, buscó la meta de Alisson con ahínco.
Los chicos de Klopp, con una fuerte presión, dominaron al inicio, aunque Alisson le negó el gol a Dani Olmo en el 10′. Poco después, fue Gulácsi el que se hizo gigante en la otra portería. Primero ante un remate de cabeza de Jota y segundo en un mano a mano contra Salah.
En poco se pareció el segundo acto al primero, al menos en su inicio. A pesar de que Nagelsmann intentó mover el árbol mediante cambios ofensivos, Alisson no se sentía amenazado. Sin embargo, todo cambió en el 65′. Sørloth, uno de los cambios, remató al travesaño pudiendo hacer el 0-1.
Pero cinco minutos después, en una gran jugada colectiva de los “Reds”, Salah desde dentro del área batió a Gulácsi sentenciando la eliminatoria. Este tanto fue un mazazo para el Leipzig, que en el 74′ encajó el segundo tras otra buena jugada del Liverpool. Mané marcó a placer para sellar la clasificación de su equipo para los cuartos de final.