Barack Obama, presidente de Estados Unidos, insistió en el tema de racismo y pobreza en el país y señaló que estas condiciones generan protestas sociales como las ocurridas en fecha reciente en Baltimore.
Obama señaló que pese a que Estados Unidos ha logrado avanzar en detener la discriminación de sus minorías, al país lo afecta aún una larga historia de esclavitud y segregación racial.
Ese contexto creó una dinámica en que la policía hace blanco indebido de minorías, señaló el presidente, tras considerar que éstas se sienten afectadas de manera injustificada por las autoridades, lo que genera desconfianza y tensiones sociales.
El presidente aseguró que las protestas sociales registradas en Estados Unidos, luego de la muerte de afroamericanos a manos de la policía, han sido alimentadas por una sensación general de impotencia e injusticia.