En medio de la polémica generada por la entrada en vigor del Nuevo Código Penal que reduce las penas de los violadores, al ser garantizada tras una adecuada readaptación, el diputado Presidente de la Comisión de Procuración e Impartición de Justicia del Congreso del Estado, José Bravo Negrín reconoció que los penales de la entidad tienen muchas deficiencias para la reinserción social.
“A mi me parece que tienen muchas deficiencias los Ceresos”, señaló tajante Bravo Negrín antes de cortar la atropellada entrevista que brindó a las afueras de la sala María Lavalle Urbina del Congreso del Estado.
Esta declaración del legislador local se suma a los estudios realizados por la Comisión Nacional de Derechos Humanos y la del estado, cuyos resultados han hecho público sus titulares, Raúl Plascencia Villanueva y Ana Patricia Lara Guerrero, respectivamente, y que van en el mismo tenor, de calificar como graves las carencias que tienen los penales del Carmen y de San Francisco Kobén, tanto en infraestructura, como programas de salud, pero sobre todo de reinserción social.
Bravo Negrín se contradijo, ya que a pesar de la reducción de las penas a violadores que plantea el Nuevo Código, lo cual es retomada de otros países con sociedades más avanzadas y con verdaderos programas de reinserción, “lo que garantiza la nueva norma es la reparación del daño, aunque esto no se puede hacer en los homicidios ni violaciones”.
