A unirse en oración para preservar la paz que están perdiendo las familias llamó el párroco de la iglesia de Dzitbalché José Luis Ye Ehuan con motivo del primer viernes de cuaresma destacando que este tiempo es una oportunidad para devolver al alma la tranquilidad que se ha puesto en juego por la pandemia.
También llamó a los feligreses a practicar las obras piadosas cómo es el ayuno, y explicó que esto más que dejar de ingerir alimentos por un tiempo prolongado, significa dejar aquellas cosas o acciones a las que tanto nos aferramos pero que nos hacen daño.
El sacerdote sostuvo que todas estas acciones ayudan a fortalecer la fe y el corazón que está falto de la presencia de Dios porque las nuevas generaciones han dejado todo esto a un lado.
José Luis Ye Ehuan tambíen destacó qué es importante compartir en este tiempo de cuaresma con el prójimo lo que la vida le proporciona a cada ser humano pues son estas acciones del agrado de Dios y lo que permitirá vivir estos días con devoción.