El halterista campechano Maximiliano Balam Naal se convirtió en el séptimo mejor pesista del planeta en la categoría Juvenil, después de su participación en el Campeonato Mundial de Levantamiento de Pesas que se está efectuando en Lima, Perú, donde terminó con marca personal de 103 kilogramos en Arranque y 133 kg. en Envión, para un Total de 236 kilogramos.
El oriundo del Municipio de Hecelchakán, se convirtió así en el mejor pesista campechano ubicado mundialmente en toda la historia de este deporte, pues hace unos años Josué Aguilar Chan Logró un noveno y un onceavo lugar en el Mundial Juvenil que se hizo en Europa, mientras que Julián Ramírez Virgilio también se ubicó onceavo.
Max Balam, emocionado subió a las redes sociales la siguiente leyenda apenas terminó su participación: “esto es lo que hago, esto es lo que amo”, al referirse a la bella disciplina del levantamiento de pesas, donde ha recibido infinidad de felicitaciones, tanto de sus familiares como de amigos, compañeros de gimnasio y de autoridades deportivas, además de los entrenadores locales.
Un gran mérito el séptimo lugar, pues compitió contra 23 elementos del mismo número de países, donde el ganador fue un colombiano; el pesista campechano tiene un lugar en la historia de este deporte para nuestro Estado con ese lugar.
Este joven entrena bajo la tutela del cubano Jorge Pérez, quien dijo que mejoró su marca personal que hizo en la Olimpiada Regional donde hizo 102 en Arranque y 126 en Envión, para que la noche del jueves terminara con 103 y 133, muy buena marca, tomando en cuenta que queda tiempo para mejorarla de cara a su próximo compromiso que es la Olimpiada Nacional.
Este pesista tiene la promesa de la Federación Mexicana de Levantamiento de Pesas, de quedarse en la ciudad de México, D.F., donde buscará una mejor preparación ya que también está en la mira para otros eventos de talla internacional y qué mejor lugar para prepararse que estando en el altiplano.
Por lo pronto, sólo queda felicitar a este fortachón campechano, que ha mostrado que cuando se tiene la capacidad y se trabaja con humildad las cosas se van dando y siempre positivamente.